El Virus Zika: Todo lo que Debes Saber

El 5 de mayo de 2016, se hacía público el primer embarazo de una española en el que el feto sufría de microcefalia a causa de la infección de la madre por el virus Zika. Se trata del segundo caso en Europa, pero se han registrado casi 1.200 bebes con esta malformación en Brasil y otros países de Sudamérica y el Caribe.

Fuente: Getty Images

Como ha venido siendo habitual en lo que llevamos de siglo XXI, cada cierto tiempo inunda, en un visto y no visto, los telediarios de todo el mundo una enfermedad desconocida hasta ese momento causada por un virus, bacteria o prion, del que nos tenemos que proteger a toda costa. La enfermedad de las vacas locas estuvo con nosotros desde finales de los años 90 del siglo pasado hasta alrededor del año 2007; la gripe A se propagó por los medios de comunicación durante los años 2009 y 2010 haciendo a la población temer una posible infección a causa de la fácil transmisión del virus H1N1 causante de la dolencia, pero que finalmente no tuvo tanto impacto como se consideró en un primer momento.

Ahora le ha tocado el turno al virus Zika que, de la noche a la mañana, ha aparecido infectando a casi 40 españoles, causando una epidemia en Sudamérica y el Caribe, dejando a Brasil como el país más perjudicado con más de un millón de casos confirmados y llegando a infectar a personas del continente asiático y del norte australiano.

Pero:

-          ¿Cuál es el origen del virus?

-          ¿Cómo se ha propagado tan rápido?

-          ¿Cuáles son sus síntomas?

-          ¿Cuál es su tratamiento?

-          ¿Tiene efectos secundarios?

El origen del virus Zika lo encontramos en Nigeria donde, en 1968, se aisló por primera vez en seres humanos. Se han registrado casos de las dolencias que provoca desde los años 50 del siglo XX y, desde entonces hasta ahora, ha tenido incidencia en prácticamente todos los países del África subsahariana, además de países asiáticos como la India, los países de la península de Indochina, Malasia y Filipinas.

El encargado de la transmisión del Zika lo encontramos en los mosquitos del género Aedes, lo que hace que, en lugares con clima tropical, donde las temperaturas son altas, hay una estación de lluvias y tienen un alto índice de humedad, encuentre el lugar perfecto para propagarse. Es por esto que la proliferación de este insecto se haya producido en países subsaharianos y no en Marruecos, Argelia, Túnez o Sudáfrica, donde la incidencia ha sido mínima.

Mapa del clima tropical.

El clima es uno de los factores por el que podemos entender la rápida proliferación de infectados por el virus Zika en Sudamérica, donde, desde abril del 2015 hasta ahora, se han dado miles de casos confirmados. El segundo factor, según apunta varios expertos, lo encontramos en la celebración del Mundial de 2014 en Brasil, donde la llegada de visitantes del continente africano infectados de Zika pudo facilitar la entrada del virus en ese país y, de ahí, propagarse a Colombia, Honduras, El Salvador y algunos países caribeños.

Otro factor, aunque está sin confirmar, es la transmisión del virus a través de las relaciones sexuales. El primer caso documentado sobre esta manera de propagación la encontramos en el año 2009, donde un biólogo norteamericano contagió el virus a su mujer al practicar sexo sin protección tras un viaje a Senegal. Por tanto, este tercer factor nos facilita entender la rápida propagación de infectados por este virus, sí comprobamos que Brasil tiene un grave problema con la prostitución y que los países subsaharianos tienen muchas dificultades para acceder a métodos anticonceptivos y profilácticos.

Aunque se han dado caso de infectados por Zika en España, es poco probable que se propague con tanta vehemencia por nuestro país y el resto de Europa al no contar con ninguno de los factores explicados anteriormente. Todos los diagnósticos realizados dentro de nuestras fronteras se han realizado a personas que habían viajado recientemente a países sudamericanos.   

Según apunta la Organización Mundial de la Salud, la investigación sobre el virus Zika es reciente y se desconoce, por ejemplo, cuanto es el tiempo de incubación o sí dispone de más vías para transmitirse a parte de los ya comentados. Lo que si conocemos son sus síntomas y tratamiento. Según comenta la OMS, las manifestaciones de la enfermedad son similares a las del Dengue, con dolores de cabeza, erupciones cutáneas, conjuntivitis, dolores articulares y musculares. Al ser síntomas comunes a muchas dolencias sin demasiada relevancia, las personas infectadas de Zika no suele acudir a centros sanitarios y espera a que remitan, lo que no suele llevar más de siete días.

Estos síntomas no son mortales y los pacientes logran recuperarse satisfactoriamente, ahora bien, el problema lo encontramos en la complicaciones que genera en según qué condiciones. Una de estas complicaciones, como he mencionado al principio, es la posibilidad de que una embarazada, al infectarse de Zika, pueda provocar malformaciones en el feto como la microcefalia. Como apunta la OMS, hace falta más investigaciones al respecto puesto que, además del caso expuesto anteriormente, se han dado otros en el que una mujer infectada ha tenido un bebe sano o en el que una embarazada de gemelos ha parido un bebe con microcefalia y otro sin ningún tipo de malformación o trastorno. 

Un estudio realizado durante la epidemia de Zika desarrollada en Oceanía entre los años 2013 y 2014, se encontró una relación entre el síndrome de Guillain-Barré y el virus Zika. De los 42 pacientes estudiados con Guillain-Barré, debilidad muscular que puede provocar complicaciones en el sistema respiratorio y en casos extremos, la muerte, el 98 por ciento eran portadores de virus Zika. Se podría decir que, ante una muestra estudiada tan pequeña, no se puede sacar como conclusión una relación directa entre el Virus y el Síndrome, cosa que sería cierta si no fuera porque el Guillain-Barré es una enfermedad muy rara que padece uno de cada 100.000 habitantes.

Hay que indicar de nuevo que las investigaciones sobre este virus son relativamente recientes, por lo que se desconoce muchos aspectos del mismo y ninguno de los efectos secundarios explicados está comprobada al cien por cien su relación directa con el virus Zika.

Todavía no se ha desarrollado ninguna vacuna para nuestro virus protagonista, pero tras haberse desarrollado ya una vacuna para el Dengue, enfermedad que transmite el mismo tipo de mosquito, se espera que en poco tiempo tangamos una disponible. Mientras tanto, la mejor manera de prevenir el Zika es la utilización de repelentes anti mosquitos, el uso de métodos profilácticos cuando se mantienen relaciones sexuales en países tropicales y, la más obvia de todas, no viajar a países como Brasil o Colombia donde hay una epidemia en curso y las posibilidades de infectarse son muy altas.

Como reflexión final, los medios de comunicación utilizan todas aquellas noticias novedosas y con una cierta carga de morbo para suscitar preocupación en la masa y atraerlos hacia la pantalla. Acciones que muchas veces llevan a la exageración y a hacer de un problema chico uno mayor, sin ningún tipo de base que lo corrobore. El Zika es el que ha tocado esta vez, y, aunque tiene ciertas complicaciones, lo más seguro es que desaparezca de nuestras vidas en cuanto salga a la venta las vacunas para no volver a escuchar de él nunca más.